El Ingreso Mínimo Vital (IMV) ha llegado en octubre de 2025 a 86.815 hogares valencianos, según se desprende de las últimas estadísticas publicadas por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). En esos domicilios residen 263.406 personas beneficiarias de esta renta fundamental para personas en situación de vulnerabilidad económica y social. Por provincias, un total de 39.515 perceptores de ese ingreso estatal residen en la provincia de Valencia, mientras que 36.893 personas habitan en las comarcas de Alicante y 10.407 beneficiarios en la provincia de Castelló.
La radiografía del Ingreso Mínimo Vital: Una sociedad valenciana más empobrecida que la media nacional
La radiografía del Ingreso Mínimo Vital (IMV) retrata una sociedad valenciana significativamente más empobrecida que la media de España. De hecho, la cuantía que se percibe por hogar alcanzaba en octubre los 513,39 euros mensuales, un 5,2% más que los 487,21 euros que reciben de media los acreedores de esta prestación en el conjunto del Estado español. Este diferencial refleja la mayor vulnerabilidad económica de los hogares valencianos.
Si se realiza el desglose por beneficiario individual, es decir, lo que recibe mensualmente cada uno de los integrantes del núcleo familiar que accede a esta prestación, la cifra se sitúa en 169,21 euros por persona, frente a los 159,40 euros de la media española. Esta diferencia también evidencia que los hogares valencianos requieren mayores apoyos económicos para cubrir sus necesidades básicas.
Estructura familiar de los perceptores: Mayoría de adultos con menores a cargo
En los hogares que cuentan cada mes con ese ingreso de ciudadanía residen adultos y en la mayor parte de los casos, también menores de edad. Casi dos de cada tres prestaciones, exactamente 55.489 de las citadas 86.815, son cobradas cada mes por adultos con menores a su cargo. Esta cifra subraya el papel fundamental del IMV como herramienta de protección para las familias con hijos en situación de vulnerabilidad.
Las familias monoparentales perceptoras de este ingreso representan alrededor de la séptima parte de los perceptores totales. En concreto, 13.276 familias monoparentales valencianas reciben esta ayuda. A nivel nacional, en España son 131.998 las familias monoparentales que reciben esta prestación social, lo que demuestra la importancia del IMV para este colectivo especialmente vulnerable.
Familias numerosas: Composición y tipología de los hogares beneficiarios
En la mayoría de los hogares que reciben esta ayuda por estar en situación de vulnerabilidad económica (al no disponer de ingresos o patrimonio suficientes) reside más de un menor con dos, tres y hasta cuatro adultos. La casuística es diversa y refleja la complejidad de las estructuras familiares actuales:
Un adulto con dos menores: 4.730 hogares valencianos
Dos adultos con dos menores: 13.626 hogares
Dos adultos y más de dos menores: 9.428 hogares
Tres adultos y varios menores: 3.659 casos
La cuantía de la prestación se incrementa en función del número de niños y adolescentes de la unidad de convivencia, de ahí que el IMV constituya una herramienta fundamental en la lucha contra la pobreza, especialmente contra la pobreza infantil. Este mecanismo de ajuste según el tamaño familiar garantiza que los hogares con más dependientes reciban una protección económica proporcional a sus necesidades.
Distribución por sexos de los beneficiarios valencianos
Si se desglosa por sexos, una clara mayoría de los beneficiarios del IMV en la Comunitat Valenciana son hombres. En concreto, 57.611 personas de sexo masculino frente a las 29.204 mujeres que perciben ese ingreso social en València, Alicante y Castelló. Esta distribución refleja que en muchos hogares beneficiarios, el titular de la prestación es un hombre adulto responsable de menores o de otros miembros del hogar.
El peso de la pobreza valenciana en el contexto nacional
En toda España son 773.272 hogares los que reciben ese ingreso y 2.363.554 personas las que se benefician de esta prestación fundamental. Si se comparan estos datos valencianos con las cifras nacionales, puede concluirse que el peso valenciano es más que evidente y significativo. Así, el 11,22% de los perceptores del IMV residen en la Comunitat Valenciana, una proporción muy superior a la que representaría la población valenciana en términos generales.
El coste bruto del IMV, la llamada nómina o gasto presupuestario total, asciende en toda España a 532,6 millones de euros mensuales, de los cuales 63,7 millones de euros van a parar a hogares valencianos. Esta inversión estatal representa aproximadamente el 11,96% del gasto total en IMV, confirmando que la Comunitat Valenciana concentra una proporción significativa de los beneficiarios y del gasto asociado a esta prestación.
Crecimiento anual del IMV: Expansión de cobertura y nuevos beneficiarios
En el último año, el número de hogares con prestación en toda España se ha visto incrementado en un 19,25% y el número de beneficiarios ha crecido un 20,1%. Este crecimiento refleja tanto la expansión de la cobertura del programa como el aumento de la vulnerabilidad económica en la sociedad española.
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha explicado que: «El IMV es una herramienta útil en la lucha contra la pobreza y estamos haciendo un gran esfuerzo para llegar a las personas que lo necesitan. Por eso que crezca el número de prestaciones significa que estamos ampliando nuestra cobertura, estamos llegando donde antes era más difícil llegar».
En concreto, durante el mes de octubre, hay 124.803 prestaciones activas más que las que había hace un año y se han sumado 395.402 beneficiarios adicionales en el conjunto de España. Estos números demuestran la dinámica expansiva del programa y su creciente importancia como red de protección social.
Protección reforzada a la infancia: Menores de edad y jóvenes en vulnerabilidad
En el conjunto de España, el 40,1% de los beneficiarios son menores de edad, lo que supone 968.881 niños, niñas y adolescentes protegidos por esta prestación fundamental. La media de edad de los beneficiarios del IMV es de 28,31 años, lo que supone un importante sostén para los jóvenes en situación de exclusión social y económica.
Aunque esta prestación va ampliando su cobertura de forma progresiva, también va creciendo el número de hogares en el umbral de la pobreza. La ministra Elma Saiz ha destacado que: «Gracias al proceso de evaluación continua de esta prestación, hemos incorporado mejoras para los jóvenes que les faciliten el acceso a la prestación cuando están en situación de vulnerabilidad».
Mejoras implementadas para facilitar el acceso de jóvenes y menores
En este sentido, se han incorporado mejoras significativas dirigidas a facilitar las condiciones de acceso a la prestación para colectivos especialmente vulnerables. Por ejemplo, pueden solicitar la ayuda personas mayores de 18 años o menores emancipados con hijos o hijas a cargo. Además, se ha reducido el período de vida independiente requerido para los jóvenes menores de 30 años, pasando de 3 años a 2 años.
Por otro lado, la prestación se ha convertido en una red de protección básica para jóvenes de 18 años que salen del sistema de protección, menores ex tutelados y otros jóvenes que con 18 años se quedan en situación de orfandad absoluta. Este colectivo puede acceder automáticamente al IMV al cumplir la mayoría de edad sin necesidad de acreditar ningún año de vida independiente, garantizando una transición protegida hacia la vida adulta.
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